Fundada en 1981 por Gérard Glotin, presidente de la compañía Marie Brizard, la Asociación de Los Hénokiens defiende a las empresas familiares que apuestan por una estrategia orientada al largo plazo. La asociación reúne a empresas muy longevas, de al menos 200 años; que permanecen dentro de la misma familia -la mayoría en manos de los descendientes del fundador y con una gestión efectiva a cargo de uno de ellos- ; y que gozan de buena salud financiera. Todo ello con la modernidad como telón de fondo. La asociación cuenta con cincuenta empresas procedentes de nueve países y recibe su nombre del patriarca hebreo Henok, quien vivió 365 años.
Como explica Nicolas Mirabaud, socio gestor del Grupo Mirabaud, «Como representante de la séptima generación de los fundadores del banco me enorgullece especialmente que Mirabaud entre en la Asociación de Los Hénokiens». Nacida en Ginebra en 1819, Mirabaud es una empresa privada familiar que se especializa en gestión patrimonial, Asset Management y finanzas corporativas.
«Los otros tres socios gestores y yo», prosigue Nicolas Mirabaud, «compartimos la convicción de que nuestro espíritu emprendedor y nuestro modelo de negocio familiar, basado en la colegialidad, nos permiten evolucionar e innovar. Nuestras decisiones comprometen a las generaciones venideras, y esta responsabilidad constituye la mejor garantía de permanencia de la empresa. Nuestros clientes acuden a nosotros porque saben que su patrimonio, personal o profesional, será gestionado de la misma manera que el de la familia Mirabaud».
Camille Vial también forma parte de esta séptima generación de la familia fundadora de Mirabaud. Socia gestora del grupo y CEO de Mirabaud & Cie SA, explica: «La internacionalización que hemos experimentado en los últimos 20 años, pasando de tener presencia exclusivamente en Suiza a que el 50% de nuestro personal esté en otros países, así como la evolución de nuestra oferta, son el reflejo de la adaptación constante de la entidad a las necesidades de nuestros clientes y a los desafíos de cada época. La pertenencia a Los Hénokiens plasma nuestra voluntad de preservar nuestros valores, aquellos que nos permiten mantener la excelencia de nuestros servicios y construir nuestros éxitos futuros».